Nuestro sistema es una solución integral de Terapia de Presión Negativa (TPN) diseñada para tratar heridas crónicas, agudas y de difícil cicatrización.
Combinamos aparatología electrónica de última generación con insumos estériles de alta calidad para crear un entorno que favorece la regeneración natural del tejido.
A diferencia de las curas tradicionales, nuestro equipo mecánico-electrónico suministra una presión negativa controlada (vacío) sobre la zona afectada.
Esto no solo aísla la herida del medio ambiente, sino que fuerza la circulación sanguínea hacia la zona, impulsando el crecimiento de tejido nuevo y acelerando drásticamente el cierre de la herida.
El éxito de nuestro tratamiento se basa en la gestión inteligente de los fluidos y la estimulación celular. El sistema actúa como un filtro biológico avanzado:
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